El ciclo “A una Coca-Cola de distancia” del 59 FICX finaliza con el encuentro presentado por Ricardo Apilánez con Ana Lambarri, Ángel Santos y Lois Patiño, directores que compiten con sus trabajos en la selección oficial de cortometrajes del festival.
La directora Ana Lambarri presentó su cortometraje 36, Premio Proyecto Corto Movistar+, que cierra su trilogía sobre la violencia sufrida por las mujeres (16; 26) en esta ocasión explorando la incomunicación y el silencio social asociados a la violencia de género. El corto crea una atmósfera tensa a partir de un gran plano secuencia que revela el sufrimiento interno de su protagonista: una mujer que ha sido golpeada instantes antes de celebrar una idílica comida entre amigos en su casa. Lambarri explicó que con la elección de este recurso y con el acercamiento del filme al género del thriller quería “coger al espectador, meterlo dentro de la situación y que no tuviera escapatoria”, algo que ha emocionado al público en las salas e incluso (en sus propias palabras) a ella misma.
Por su parte, el gallego Ángel Santos estrena en el 59 FICX Así vendrá la noche, una película breve centrada en la visión de Andrea, una chica que envía un mensaje de audio a Pablo, su antigua pareja de quien le separa el tiempo, la distancia, el dolor y el rencor. El cortometraje, que funciona a modo de carta larga o novelita del siglo XXI, es “un torrente de palabras en 15 minutos”, un ensayo sobre cómo filmar la voz con el que el director “quería jugar a construir una narración entrelazando palabras y silencios”. Asimismo, Santos ha explicado que Así vendrá la noche servirá como base del largometraje en el que se encuentra trabajando actualmente.
Otro de los principales cineastas del Novo Cine Galego, Lois Patiño, nos acercó a Sycorax, filme en el que, junto a Matías Piñeiro, articula una peculiar y libérrima adaptación de La tempestad de Shakespeare desplazando la acción a las islas Azores, en un tono a medio camino entre lo contemplativo y lo silencioso. Presentado dentro de la Quincena de los Realizadores de Cannes, Sycorax conjuga una mirada poética con una puesta en escena donde los directores fusionan realidad y ficción, mitología e historia, para acercarnos a “las otras” de la historia, en concreto a la bruja Sycorax y al espíritu Ariel. Patiño explicó que su inspiración procedía en parte del ensayo Calibán y la bruja de Silvia Federici y en su interés por explorar cómo la mirada cinematográfica es capaz de teñir la realidad de ficción.